Parker's Mood

Uno de los momentos más orgásmicos de la Historia del Sonido. Son pocas las grabaciones que hay de Charlie Parker pero esta es suficiente para admirar al pájaro -que entra sin dudas en la lista de infladitos queribles del siglo XX junto con Neruda, Lezama Lima, Hitchcock y el Mao que no asesinó- dando cátedra vanidosa a otro gigante -Hawkins- que parece decir en un inglés arábigo mientras sopla con boca de farsante su caño hipervalorado: "I do not play with fear, but sometimes fear plays with me." Lo cual me parece cierto, y más cuando tenes a Parker al lado tirando las frases que sabemos a todos nos rozaron la cabeza pero que nadie salvo él puede concebir, simplemente porque Parker siempre fue mucho más osado y juguetón que cualquier otro y así también quedó liquidado pero no vayamos con las nostalgias de la heroína ni la pérdida de licencia de cabaret ni sobre esas viejas pistas falsas. El tipo está sentado y fumando un cigarro, está pactado que Coleman arranque y más tarde lo interrumpe con una disonancia para entrar en el juego de la balada ¡Y cómo, con un solo que podría conmover hasta a un tipo sordo! Mientras tanto Hawkins traga saliva y piensa: "La puta madre, me está matando; nunca voy a ser tan bueno como este drogadicto." Entonces Charlie lo mira de reojo mientras le pone caritas vaya a saber uno a quién. Después lo deja cerrar al corbatudo, el primer plano y los cachetes quizás engañan, pero la cosa estaba dicha hacía mucho tiempo. Parker es una confirmación que siempre está delante nuestro, y eso que murió en el 55.